Pájaros en la cabeza,
mariposas en el estómago.

martes, 24 de enero de 2012

Goodbye 19


Adiós a mis 19, adiós a un año increíble, adiós a la edad que siempre quise tener.
Dar el gran salto a la madurez, acostumbrarme a ver el número 2 durante al menos 10 años. Pensar que ya toda tu etapa de GRAN cambio se va. Seamos realistas, TODO, me ha pasado en estos 10 años.

10 años de intensa vida, 10 años de viajes, amigos, descubrimientos, metas alcanzadas, retos personales, alguna que otra despedida y algún que otro sentimiento. Si cuando cumplí 10 años hubiese imaginado que haría tantas cosas... hubiese empezado a correr.

Pensar que los días de colegio quedan tan atrás... Y que a escasos minutos de cumplir 20 empiezo a verlo todo como si empezase a irse, y no asumo, que ya se fue hace mucho.

Me quedan tantas cosas por hacer en esta vida, tantas personas que conocer, tantos sentimientos que mostrar y tantos sueños que vivir... tanto queda en el futuro que no soy capaz de pensar en él, solo centro mi atención en lo que se fue y lo que no volverá. Ser un niño ya no es algo presente, ¿comportarse como uno?, no tanto como solía, ¿comenzar a madurar?, empezaré a intentarlo... ¿soñar como uno? Por siempre y para siempre.

Cumpliré 20, 30,... 60 años y eso no cambiará. Seguiré siendo el mismo niño alegre y soñador con mariposas en el estómago y pájaros en la cabeza.

Continuaré viendo el mundo con ojos inocentes, alargaré la vida tanto como pueda, alargaré los sueños tanto como me sea posible.

Mi vida, ahora tiene 20 inviernos. ¿Mañana?, algunos sueños más.

Goodbye 19!

lunes, 16 de enero de 2012

Sharin' dreams

Pocas personas tienen la suerte de poder compartir un sueño con alguien, de poder sentir lo mismo al oír una canción, de sonreír prácticamente al mismo momento al escuchar el nombre de una ciudad o morir de risa por pronunciar algunas frases sin sentido y ser solo la otra persona la que entienda lo que dices sin articular palabra.

Personas a las que les puedes confiar tu vida porque sabes que no la van a estropear.

Tu música, tus metas, tus sueños, tus viajes, sin esa personita no serían lo mismo.
Tener en la cabeza todo un futuro planeado, un futuro propio, pero a la vez compartido. Saber que va a estar ahí, a lo largo de todo el camino, en tu música, tus sueños, tus metas, tus viajes... Aunque a veces la vida los separe, aunque a veces las situaciones los lleve por direcciones contrarias, por muchos océanos intrusos que se coloquen entre ambos, existirán esos momentos, pasados y futuros que lograrán unir el mundo para saber que la otra persona está ahí.

Atravesar un país entero, elegir las canciones que van a sonar en tu cabeza, en el recuerdo de ese viaje durante el resto de tu vida, planear paso a paso lo que será la aventura de sus vidas, mantener la sonrisa todo el tiempo, recordarlo y saltar de emoción.


Algún día, cuando los cabellos se vuelvan grises, el alma se tornen hojas de otoño y los ojos lloren al ver imágenes pasadas, entonces será cuando abran su caja de recuerdos, se sienten en algún lugar con el que siempre hubiesen soñado y hablen de cuán grandiosas fueron sus vidas, de cuán preciosos fueron los momentos que juntos, labraron en algún paso del camino. Ese día, será el momento de enorgullecerse de haber tenido a la otra persona a su lado durante tantos años, durante tantos momentos, durante tantos libros, durante tantas aventuras.

A veces se llama Paula, a veces Marissa, a veces es pelirroja, y a veces solo una pequeña persona con alma de musa y sueños compartidos, compartidos con su "principito", como ella le llama.