Pájaros en la cabeza,
mariposas en el estómago.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Cuando no te queda más remedio que crecer...

No tengo el ánimo suficiente para saber cómo odiar a alguien, simplemente paro el gran reloj de los pensamientos durante unos instantes para que me de tiempo a suspirar y saber que no vale de nada odiar a los demás... 
 Es más o menos como hurgar en el cajón de las galletas sabiendo que las que compró mamá eran de las que no nos gustaban... una pérdida de tiempo.


No me queda más que inflar globos, y llenarlos de todo el odio que a veces puedo sentir, hacer que vuelen alto... y que en los anillos de Saturno recaiga la responsabilidad de explotar esos globos y hacer que el odio viaje tantos años luz como sea posible...


... sentir como el mundo crece y mi mente se queda detrás vislumbrando sombras de aquel niño que una vez dijo "tengo miedo", es algo que por mucho mundo que recorramos siempre hurgará en nuestra mente como lo hiciste una vez en el cajón de las galletas...


Algún día notaremos cómo no nos hace falta llenar más globos ni perder el tiempo removiendo cajones sin fundamento, llegará un día en que... no sé qué pasará ese día... pero sé que llegará y será genial.


Sólo puedo decirte:  Shh,.. no digas nada, sólo ven conmigo al mundo de los sueños del que nunca regresé...




Mr.: Wonderland.




Do u believe in magic? 


I do.

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